Últimamente el término piratería está muy en boga. Generalmente se usa de una forma peyorativa. Estamos hablando de copias, sin el consentimiento del autor. Vamos que el autor no percibe un pavo. Ya lo dice el físico Richard Stallman y el experto en propiedad intelectual, Eduardo Samán, entre otros. Argumentan “que el uso de la expresión piratería para referir a las copias no autorizadas es una exageración que pretende equiparar el acto de compartir con la violencia de los piratas de barcos, criminalizando a los usuarios”
El término compartir es algo que desde que eres pequeño lo haces, compartes tiempo, antes compartías cintas. Uno se compraba el máster original y tú te lo grababas en el doble platina, qué tiempos aquellos… ¿verdad? ¿A quién no le gusta compartir? Bueno, habrá personas a las cuales no les gusta, pero a la gran mayoría sí, compartes un momento, una comida, una opinión, una canción, una película, etc. Todos estamos compartiendo constantemente algo.
Compartes una canción, un libro, una película un juego de la play… y si te pasan el “máster” lo pirateas, es decir, lo copias, para evitar comprártelo..
Cuando no existían las fotocopias, las personas se prestaban los libros entre sí. ¡Ojo! si esto lo haces muy a menudo… puede ser que el vídeo, CD o libro no regrese, es curioso, ¿verdad? Pero es así… Tú dejas algo, lo que sea, con la condición de que te lo retornen… y ¡zás! Eso nunca sucede. Miles de excusas son las posibles y al final el material que dejas con total ingenuidad, ¡jamás regresa!
Ahora con internet y las redes sociales la cosa se ha complicado, pero no deja de ser lo mismo que hacían nuestros antepasados o tú mismo cuando eras nano. Ha cambiado el libro por PDF, el casete por el CD, etc…
Cuando compartes una canción con alguien, no estás haciendo nada malo, das algo que a ti te gusta y lo difundes, de esta manera estas dando a conocer algo que a ti de algún modo te llena, y esperas que la parte contraria lo acepte con agrado.
Y tú que te consideras artista, ¿por qué lo eres? Para hacer algo que a los demás les guste y a ti te satisfaga hacerlo, entonces ¿por qué no compartir tus canciones? Los cantantes, por ejemplo, donde ganan más dinero es en sus conciertos. Ya muchos grupos han puesto sus temas en internet mucho antes de que comience la venta de su disco en sentido físico, por así decirlo. Un claro ejemplo de cantante que se dio a conocer antes en las redes que en el mercado sería Pablo Alborán. ¡Y mira dónde está!
Hoy en día cualquier grupo que se precie tiene su propio canal en Youtube y es así, el tema de pirateo al final se queda en agua de borrajas, es decir en nada.Ya lo dijo Alex de la Iglesia: “Internet no es el futuro, como algunos creen, internet es el presente. Es la manera de comunicarse, de compartir información, entretenimiento y cultura que utilizan cientos de millones de personas… Internet es precisamente la salvación de nuestro cine”
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